jueves, 11 de julio de 2013

Y el Laicismo Apa

Afirma vaticano que los Superhéroes son Religiosos


El diario vaticano L’Osservatore Romano publico recientemente sobre la religiosidad de los superhéroes y en un largo artículo titulado “¿Es Hulk de verdad católico?” repasa las creencias religiosas de los más famosos personajes de cómic, entre ellos Superman, Lobezno o Cíclope,heló  aquí.

“¿Puede bastar un rosario entre las manos para definir como católica a una persona?”, se pregunta el vespertino de la Santa Sede, que recurriendo a un portal de internet estadounidense sobre cómic en el que se señala la religión de todos los superhéroes, resalta que Bruce Banner, el increíble Hulk, el hombre verde, está casado por la Iglesia.
“Lo está con la amada Betty Rossi y el rito está oficiado por un sacerdote católico”, precisa el diario, que agrega que “otras señales” diseminadas entre los centenares de viñetas “revelarían inequívocamente su fe”, entre ellas una en la que aparece con un rosario entre las manos.
Hulk no es un caso aislado, subraya el vespertino vaticano, que asegura que los personajes con poderes excepcionales que declaran explícitamente su fe no son una minoría y que el número de libros de cómic cuyos personajes se declaran cristianos ha crecido rápidamente en los últimos años.
Así, señala que en la película de Superman se confirma la fe cristiana, metodista, para más exactitud, del periodista Clark Kent.
L’Osservatore Romano agrega que la prensa estadounidense llega incluso a hablar de la “dimensión cristológica del personaje”.
¿Exageraciones?, se pregunta el diario, que añade que escuchando al director del filme, Snyder, éste señala que en muchos diálogos de la película la referencia a la religión cristiana es directa.
“Cuando Jor-El, el padre krytoniano de Superman, le pone en la nave espacial para enviarlo a la tierra, la madre, Lara, tiene miedo y dice: ‘será marginado, lo matarán’. Pero el padre responde: ‘Será un Dios para ellos’”, señala.
El vespertino destaca que los superhéroes están caracterizados por una doble naturaleza, humana y divina, con poderes que parecen versiones puestas al día de los personajes de la antigüedad, pero con características diferentes.
“Mientras los primeros -agrega- eran viciosos, mentirosos y dedicados a satisfacer sus propias pasiones, los de ahora combaten contra las injusticias del mundo, la prepotencia de los avaros e intervienen para restablecer un orden momentáneamente perdido”.
El periódico del Vaticano reconoce que la mayor parte de los superhéroes, sin embargo, son cristianos protestantes y recuerda que el protestantismo es la confesión más difundida en EU, y en esa línea destaca al Hombre Araña, “un protestante convencido”, y al Capitán América, “que encarna los ideales más alto de América y una tira reciente de cómic admite que todos los domingos va a la función religiosa de la comunidad”.
También resalta entre los protestantes a Cíclope, de los X-Men, y sobre todo a Lobezno, un presbiteriano escocés, “uno de los treinta personajes definidos entre los más religiosos del universo de la editorial Marvel”.
Entre los episcopalianos figuran la Mujer Invisible y Batman.
Entre los escasos católicos destaca a Selina Kyle, la Gatúbela, aunque precisa que no es muy devota, aunque tiene una hermana monja.
Otro personaje católico es Vindicator, que muestra sus promesas matrimoniales y es su fe la que salva a esta figura femenina en la lucha contra Dargil.
De la catolicidad del Rondador Nocturno de los X-Men no hay duda, asegura el diario, que señala que es el más devoto de todos.
Tambien hace hincapié en el cristianismo de la mayoría de los personajes, “y eso que una de las editoriales, Marvel, fue fundada en 1939 por el judío Martin Goodman y que los autores de los cómic son en su mayor parte judíos”.
Recuerda, no obstante, que hay algunos, como Shdowcat, que lleva un collar con la estrella de David y subraya que La Mole, de “Los Cuatro Fantásticos” en una tira de cómic de 2002 reza la tradicional plegaria judía Shema Yisrael.
El vespertino señala que tras ese viaje por el mundo del cómic hay que preguntarse si todo eso tiene valor y afirma que el mundo de hoy necesita “héroes positivos, impávidos y justos, que en la eterna lucha entre el bien y el mal siempre saben de qué parte deben estar.

“Y si detrás de ello hay motivaciones religiosas, mucho mejor”

Ahora Resulta.

La asexualidad, ¿enfermedad o conducta aceptable?




Recientemente, he escuchado varias personas mencionar o referirse al término asexual. Muchos de ellos, no conocen el verdadero significado o uso del término veamos:
Las personas asexuales son personas normales que no sienten deseo por el placer sexual. Dichos individuos, no sienten atracción sexual hacia ninguna persona y no encajan dentro de ninguna orientación sexual definida.
Generalmente, se sienten cómodos estando solos, y aislándose de la gente. Sin embargo, se muestran socialmente activos y necesitan de un grupo de amigos que sepan comprenderles y apoyarles.
Los asexuales tienden a crear un lazo afectivo hacia su pareja (si la tienen), aunque esto no implique el sexo de por medio.
El asexual posee y requiere de las mismas necesidades emocionales que cualquier persona, pero se diferencian en el modo de satisfacer dichas necesidades. 
Gran parte de los asexuales experimentan la atracción sexual, pero no sienten ninguna necesidad de exteriorizar dicha atracción. Estas personas, sienten la necesidad de familiarizarse con alguien pero al margen del sexo.
Mientras que unos empiezan por el sexo y luego piensan en conocerse, los asexuales apuestan por conocerse y dejar el sexo en último lugar o incluso renunciar al mismo.
Se calcula que entre el 1 y el 3% de la población total del planeta es asexual. Habitualmente son tratados como enfermos, locos, o incluso, que usan esa condición para encubrir su presunta homosexualidad.
Pese a que existen tratamientos médicos para aumentar el apetito sexual, muchos asexuales se rehúsan a seguirlo, al no considerarlo un problema físico ni psicológico.
Algunos expertos argumentan que la asexualidad puede ser más bien una forma de deseo sexual inhibido. También se han sugerido otras causas entre las que se incluyen abusos sexuales en el pasado, represión sexual (ya sea ésta homosexual, bisexual o heterosexual), problemas hormonales, sublimación o no haber conocido a la persona adecuada.
Hay diferencias entre la gente que se define como asexual, principalmente referidas a la presencia o ausencia de apetito sexual o atracción romántica.
Algunos asexuales pueden experimentar sensaciones sexuales, pero no tener deseo de actuar sobre ellas, mientras que otros intentan conseguir la descarga sexual mediante el coito.
Aquellos asexuales que experimentan atracción romántica, desean generalmente relaciones (que pueden ir de vínculos informales al matrimonio) con su género o géneros preferidos, pero a menudo desearían que dichas relaciones no incluyeran actividad sexual.
Según su orientación, algunos asexuales se definen a sí mismos como heterosexuales, homosexuales o bisexuales, esto está relacionado con el concepto de orientación afectiva.
Estos individuos, desean relaciones románticas, pero se encuentran en una postura difícil, ya que la mayoría de la gente no es asexual.
Dichos personajes, puede que sean capaces de tolerar el tener relaciones sexuales con sus compañeros no asexuales; sin embargo, sus parejas pueden sentirse psicológicamente afectados al ver que son incapaces de resultarle atractivo a su pareja, haciendo difícil la existencia de un romance a largo plazo.
En conclusión, los asexuales tienen distintas alternativas para escoger y poder lograr su satisfacción: llegar a un compromiso con su pareja para tener cierta cantidad de sexo de todos modos, permitir a su pareja tener relaciones sexuales con otras personas, encontrar a alguien que esté dispuesto a tener una relación sin sexo, comprometerse sólo con otros asexuales, o permanecer solos.

Cifras
Se calcula que entre el 1 y el 3% de la población total del planeta es asexual. Habitualmente son tratados como enfermos, locos, o incluso, que usan esa condición para encubrir su presunta homosexualidad. Se han sugerido otras causas entre las que se incluyen abusos sexuales en el pasado, represión sexual, problemas hormonales y otros.

Una persona asexual es alguien que no siente atracción sexual hacia otras personas. Contrariamente al celibato, que es una opción, la asexualidad es una parte intrínseca de la persona. La asexualidad no hace que la vida sea peor ni mejor, sólo diferente de la vida de la mayoría de la gente sexual. La comunidad asexual es bastante diversa, y cada persona asexual tiene diferentes maneras de sentir cosas como las relaciones, la atracción, y la excitación física.

Relaciones

La gente asexual tiene las mismas necesidades emocionales que cualquier otra persona, e igual que en la comunidad sexual, los asexuales satisfacen esas necesidades de diferentes maneras. Alguna gente asexual está más feliz sola, otros están más felices con un grupo de amigos íntimos. Otros tienen el deseo de formar relaciones emocionales o amorosas, y buscan a alguien con quien formar una pareja estable. Una persona asexual puede formar una pareja con una persona sexual igual que con otra asexual.
Sexual o no sexual, toda relación se basa en las mismas ideas: la comunicación, la intimidad, la diversión, el humor, la emoción, el respeto y la confianza. Todo esto tiene lugar en una relación sexual igual que en una relación no sexual. A diferencia de la gente sexual, los asexuales tenemos pocas expectativas sobre cómo funcionarán las relaciones íntimas. Decidir cómo coquetear o cómo ser íntimos o monógamos en una relación no sexual puede exigir mucho esfuerzo, pero sin expectativas sexuales podemos formar relaciones basadas en nuestras propias necesidades y deseos.

La atracción

Muchas personas asexuales sentimos atracción por otras personas, pero no la necesidad de responder sexualmente a esa atracción. En lugar de eso, sentimos el deseo de conocer a alguien y de acercarnos a ese alguien de la manera que sea mejor para nosotros. Muchas veces los asexuales que sentimos atracción, la sentimos hacia personas de un género en particular, o más de uno, y nos identificamos como homorrománticos, heterorrománticos o bi-románticos.

Excitación sexual

Para alguna gente asexual, ésta es algo que sienten con bastante regularidad, aunque no se vincula a un deseo de encontrar a una pareja sexual. Hay asexuales que se masturban pero no quieren sexualidad en pareja. Otra gente asexual siente poca excitación, o no siente ninguna. Como no nos interesa el sexo, en general para los asexuales un bajo nivel de excitación no es ningún problema, y centramos nuestra energía en disfrutar de otros tipos de placer.

Nota: La gente no necesita excitación sexual para ser sana, pero en algunos pocos casos puede ser síntoma de una condición más seria. Si no sientes excitación sexual o si de repente pierdes interés en el sexo, sería mejor consultar a un médico por si acaso.

Identidad

La mayoría de los miembros de esta comunidad ha sido asexual toda su vida. Igual que en unos muy pocos casos alguna gente puede cambiar de ser heterosexual a ser homosexual, algunas personas asexuales en unos muy pocos casos pueden cambiar a ser sexuales, o viceversa. Otra minoría también se considerará asexual durante un tiempo mientras explora su propia sexualidad.
No hay manera de “probar” la asexualidad de una persona. La asexualidad es como cualquier otra identidad: esencialmente es tan sólo una palabra que la gente usa para ayudarla a entenderse. Si la palabra le sirve a alguien durante alguna parte de su vida, sería perfectamente válido usarla
En una sociedad en la que abunda la pornografía, pululan los escándalos de adicción al sexo, los gays y lesbianas reclaman sus derechos y los medios de comunicación celebran el erotismo, nada causa más sorpresa que alguien se declare asexual.

En julio pasado se realizó en Londres la primera gran conferencia sobre Asexualidad. Por otro lado, el grupo Aven, cuya sigla significa Asexuality Visibility and Education Network, fue fundado en 2001 por David Jay, un asexual californiano de 30 años, y ya cuenta con 60.000 miembros en el mundo.